Restaurante Amanecer, Arrieta, Lanzarote

El lanzaroteño pueblo de Arrieta, es uno de los mejores sitios de toda la isla para disfrutar de la cocina local. Se trata de un pueblo costero, muy cerca de los Jameos del Agua y de la Cueva de los verdes, por lo que es buena idea acercarse a este pueblo antes o después de la visita turística, y probar las especialidades de la cocina lanzaroteña.

El restaurante se encuentra en la calle de la Garita, en una zona donde hay varios. Es de los restaurantes de toda la vida, donde no se puede reservar. Cuando llegas, pides mesas, y te dicen más o menos cuanto te toca esperar, y te tienes que quedar por allí para que te avisen. Para esperar tienen una zona pequeña de bar, donde se puede tomar algo.


Además de la zona de bar, el restaurante tiene un salón interior con unas 8 mesas y una

terraza con vistas al mar y a la casa Roja de Arrieta, que tiene otras 8 mesas, más o menos. Es buena idea llegar pronto, porque se suele llenar muy rápido y te puede tocar esperar hora y media, sobre todo en fin de semana o puente.

Nosotros llegamos sobre las 14:00 y nos tocó esperar una media hora. Además tuvimos suerte, porque cuando ya nos iban a sentar en el salón interior, se quedó libre una mesa para dos en la terraza y nos ofrecieron sentarnos a nosotros fuera, lo cual aceptamos. La terraza es muy agradable, da directamente al mar, está a la sombra y no hay apenas aire.

Pedimos agua y cerveza para beber y miramos que pedir en la carta. Mientras pedíamos, nos trajeron el pan y los mojos (blanco, rojo y verde), y ya los fuimos probando. Muy buenos los tres. La carta no es muy amplia, pero incluye todas las especialidades canarias como el potaje, las papas con mojo, los pescados cocinados de diversos tipos, y también algunas carnes.

Nos decidimos por una ración de queso fresco canario (4€), un potaje canario (3,50€), unas papas arrugadas (4€) y un pescado del dia (13€). El camarero nos indicó que no pidiéramos papas, que los pescados ya vienen con ellas. Esto es un detalle de agradecer, que por desgracia algunos camareros obvian. Para beber, pedimos un blanco de la casa, un malvasía seco de la isla (3,5€ la jarra de 1/2 litro).

Enseguida nos trajeron el queso. Es un plato, con 6 trozos de queso. Es de cabra,

elaborado en la la propia isla. Nos gusto mucho y con un poco de mojo, sabe muy rico. Luego llegó el potaje, en un plato bastante grande. Se trata de un guiso de garbanzos con verduras y carne. También nos gustó.





Cuando terminamos con los primeros, y ya casi habíamos dado cuenta de los mojos, nos

trajeron el pescado del día que era vieja. Es un pescado típico de Lanzarote, parecido a la dorada. En la ración vienen dos viejas, ensalada y papas. El pescado está hecho a la plancha y se nota que es fresco nada más probarlo. También nos gustó, y también lo probamos con mojos. El mojo blanco es muy parecido al ali-oli, el rojo lo hacen con pimento y pimiento y el verde con cilantro. Estaba especialmente bueno el verde.

Luego de postre nos pedimos un bienmesabe (3,50€) para compartir. Es un postre conejero a base de huevo, almendras, azúcar y limón. El sabor es parecido al turrón y te lo ponen con un helado de vainilla. El del Amanecer está muy bueno también.

Después de disfrutar un poco de la sobremesa, pedimos la cuenta. Pagamos 33.17€ (incluyendo el 7% de impuestos, más bajos en Canarias que en la península).

Como conclusión, nos ha parecido un restaurante muy recomendable, tanto para tomar pescado fresco, como para degustar otras especialidades canarias. Los camareros son muy amables, las vistas de la terraza están muy bien y la comida está buena. La relación calidad precio es muy alta. Como contras y por destacar algo, decir que al no reservar, si llegas un poco tarde, puede que te toque esperar un buen rato, y que quizá las mesas tanto en el salón como en la terraza, están demasiado juntas.